Narra esta novela la historia de cuatro generaciones de una familia keniana nativa, a lo largo del siglo XX. La figura central es una mujer nacida en una tribu y criada al modo tradicional, pero que sabe abrirse a los efectos de la colonización británica y se bautiza católica. A partir de ella, sus descendientes avanzan en el camino de la europeización y, gracias a su firmeza al educarlos, son personas dignas y laboriosas. La autora, keniana católica, pediatra y madre de familia, ha basado el desarrollo argumental de este interesante testimonio histórico-social en personajes femeninos cuyo carácter y energía les ayuda a superar obstáculos y prejuicios propios de una civilización de predominio masculino. Su visión de la evolución de Kenia en la época a la que se refiere no es, sin embargo, ni reivindicativa en sentido feminista, ni crítica frente al gobierno colonial. De todo tipo de hechos sabe extraer conclusiones favorables, aun sin ignorar realidades duras y difíciles, y destacar el avance económico y cultural del que en conjunto se ha beneficiado el país. Aunque su profesión no es la literatura, escribe con estilo ágil, directo, muy vivo y espontáneo, de fácil y entretenida lectura.
El Padre Martín, el ‘santo de la bicicleta’
Mons. Francisco Cerro, arzobispo de Toledo (derecha) y don Carlos Comendador, rector del Pontificio Colegio Español de Roma y postulador general de la Hermandad de Sacerdortes...